domingo, 14 de febrero de 2016

El destino



Siempre esta palabra me ha hecho pensar en una programación establecida para todo y todos. Una ausencia de libertad completa, una realidad de marionetas.

Hace poco la palabra en sí me va trayendo recuerdos de personas concretas porque ellas mismas utilizaron esta palabra más que nadie.

En cualquier caso mis pensamientos, como buena Aries, son totalmente contradictorios y es que no puedo pensar que todo está programado y que mi libertad es tan límitada como mi capacidad de ser humano.

Hay quién dice que en las estrellas está escrito ese destino. Eso me resulta bello, pero.. lo cierto es que no me convence mucho más que el propio hecho de que realmente no hay nada que pueda cambiarse.

Sí eso es así, quién marcó ese destino? quién dejó en esas estrellas el legado que está por venir? y por qué él o ella? qué tiene de especial? lo hará toda la vida? sí es que tiene vida..

Demasiadas preguntas, lo sé, pero todas sin respuesta, como buena filosofa. jajaja

Personalmente, creo que el destino es solo la consecuencia misma de los actos que llevaste a cabo con anterioridad y es que creo que lo que no aprendiste.. lo acabarás aprendiendo, sí te da tiempo.
Digamos que.. el destino es cumplir un proceso de maduración, pero el cómo está totalmente en tus manos.
Algo así como un libro de esos donde.. todo está escrito, pero en cada capitulo has de ir a una página concreta porque elegiste entre dos caminos por los que seguir y uno de ellos quedó atrás.

No quiero imaginar la cantidad de capítulos que ha de tener nuestro libro. Ya no sólo por el tema de que nuestra vida es inmensamente grande. Sino porque elegimos a cada segundo y cada elección es un capítulo nuevo.. TODO marca lo que somos y seremos, para siempre.

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